Dublín, la capital de Irlanda, es una ciudad vibrante conocida por su rica historia, su cultura literaria y su animada escena musical. Con un ambiente acogedor y una mezcla de modernidad y tradición, Dublín ofrece a los viajeros una experiencia inolvidable. En solo dos días, podrás explorar sus emblemáticos lugares como el Trinity College, la famosa Guinness Storehouse y disfrutar de la música en vivo en sus bulliciosos pubs. Esta guía te ayudará a navegar por la ciudad de forma accesible y con un presupuesto ajustado, sin perderte lo mejor de Dublín.

Dublín es una ciudad que se puede explorar fácilmente a pie, y su transporte público es eficiente y accesible. Asegúrate de llevar un mapa descargado o usar aplicaciones como Google Maps para orientarte. La hospitalidad irlandesa se refleja en sus habitantes, y no dudes en preguntar si necesitas ayuda. Recuerda probar la famosa cerveza Guinness y disfrutar de una sesión de música tradicional en uno de sus pubs históricos.

Itinerario día a día

Día 1: Explorando el corazón de Dublín

Comienza tu día con un delicioso desayuno en uno de los muchos cafés locales, como el Bewley’s Café, famoso por su café irlandés. Después, dirígete al Trinity College, donde podrás admirar el Libro de Kells y disfrutar de la impresionante biblioteca. Se recomienda reservar las entradas con antelación para evitar largas colas. Dedica alrededor de 2 horas a esta visita.

Luego, da un paseo por el Parque St. Stephen’s Green, un hermoso parque en el centro de la ciudad, ideal para relajarte y disfrutar de la naturaleza. Puedes pasar aquí aproximadamente una hora.

Para el almuerzo, escoge un pub tradicional como The Brazen Head, el más antiguo de Irlanda, donde podrás degustar un guiso irlandés o un fish and chips. Después del almuerzo, dirígete hacia la Guinness Storehouse, donde aprenderás sobre la historia de esta icónica cerveza. La visita incluye una degustación en la Gravity Bar, donde disfrutarás de vistas panorámicas de la ciudad. Reserva entre 2 y 3 horas para esta atracción.

Finaliza el día con una cena en un restaurante local. Te recomendamos probar platos irlandeses en el restaurante The Woollen Mills. Después de cenar, no te pierdas la vida musical en Temple Bar, donde muchos pubs ofrecen música en vivo.

Día 2: Cultura y tradiciones

Empieza el segundo día con un desayuno en el área de Smithfield, donde puedes encontrar opciones como el café The Lighthouse. Después, visita el Museo Nacional de Irlanda, que tiene exposiciones sobre la historia y la cultura irlandesa. La entrada es gratuita y puedes dedicarle de 1 a 2 horas.

Luego, pasea por el barrio de Kilmainham, donde se encuentra la famosa prisión de Kilmainham Gaol, un lugar clave en la historia irlandesa. Es recomendable reservar un tour guiado que dura aproximadamente 1 hora.

Para el almuerzo, explora el Mercado de Dublin, donde puedes encontrar productos locales y comida casera. Después de comer, visita el Castillo de Dublín, que ofrece un recorrido fascinante sobre la historia de la ciudad. Dedica alrededor de 1.5 horas a esta visita.

Termina tu viaje con una cena en un restaurante que ofrezca comida irlandesa, como el O’Neill’s Pub & Kitchen, y disfruta de una última noche con música en vivo en uno de los pubs de la ciudad, celebrando tu experiencia en Dublín.

Presupuesto orientativo

Verifica horarios/precios en webs oficiales.

Consejos finales

Al viajar a Dublín, recuerda llevar ropa adecuada para el clima variable. Las lluvias son comunes, así que un paraguas o un chubasquero son imprescindibles. Además, no dudes en interactuar con los locales; son muy amables y estarán encantados de ayudarte. Aprovecha las happy hours en los pubs y prueba diferentes cervezas artesanales. Por último, camina y explora cada rincón de la ciudad; Dublín tiene mucho que ofrecer más allá de sus atracciones turísticas.