Salamanca, conocida por su prestigiosa universidad y su impresionante arquitectura, es un destino ideal para una escapada corta. En solo 48 horas, podrás sumergirte en su rica historia, disfrutar de su vibrante ambiente estudiantil y saborear deliciosas tapas en sus animadas calles. Esta guía te llevará a través de los lugares más emblemáticos y las mejores experiencias que la ciudad tiene para ofrecer, todo mientras mantienes un presupuesto accesible. Prepárate para explorar cada rincón de esta joya española.

Salamanca es una ciudad que combina la tradición con la modernidad. Su universidad, una de las más antiguas de Europa, atrae a estudiantes de todo el mundo, lo que genera un ambiente joven y dinámico. Pasear por sus calles es como viajar en el tiempo, con edificios de piedra dorada que brillan al atardecer. La gastronomía es otro aspecto fundamental de la experiencia salmantina; el tapeo en sus bares es una actividad social esencial. En esta guía, te proponemos un itinerario detallado para aprovechar al máximo tus 48 horas en la ciudad, incluyendo recomendaciones sobre qué ver, dónde comer y cómo disfrutar de la vida nocturna local.

Itinerario día a día

Detalles del itinerario

Día 1

Comienza tu aventura en Salamanca visitando la Universidad de Salamanca, donde podrás admirar su impresionante fachada plateresca. Te recomendamos dedicar aproximadamente 1-2 horas para recorrer sus instalaciones y no olvides buscar la famosa rana en la fachada, un símbolo de la ciudad. Luego, dirígete a la Plaza Mayor, considerada una de las más bellas de España. Aquí puedes disfrutar de un café en alguna de sus terrazas y observar el ir y venir de los estudiantes y turistas.

A continuación, visita las Catedrales de Salamanca, donde la Nueva y la Vieja se complementan a la perfección. Puedes subir a la torre de la Catedral Nueva para disfrutar de una vista panorámica de la ciudad (aproximadamente 1 hora). Al caer la tarde, es hora de experimentar el famoso tapeo en la Calle Van Dyck, donde encontrarás una variedad de bares que ofrecen tapas bien elaboradas y a buen precio. Si buscas un ambiente animado, este es el lugar perfecto. Recuerda probar la tapa de hornazo, una especialidad local.

La noche en Salamanca es vibrante, especialmente en el casco antiguo, donde los jóvenes se agrupan en bares y pubs. Disfruta de un par de copas en alguno de los locales de la zona y observa cómo cobra vida la ciudad.

Día 2

El segundo día comienza con un paseo tranquilo por el casco antiguo, donde podrás disfrutar de la hermosa arquitectura de la Casa de las Conchas, un edificio emblemático cubierto de conchas de piedra. Dedica tiempo a explorar sus interiores, que albergan una biblioteca pública. Luego, no te olvides de volver a la Universidad para tomarte la foto con la rana, un rito para todos los visitantes.

A medida que avanzas en tu recorrido, puedes visitar el Mercado Central, donde podrás degustar productos locales y quizás comprar algunos recuerdos. La tarde es ideal para seguir tapeando; prueba diferentes bares y no dudes en pedir recomendaciones a los lugareños.

Finalmente, termina tu día en el Puente Romano, donde podrás disfrutar de una vista impresionante del río Tormes al atardecer, un momento perfecto para capturar fotografías memorables de tu viaje a Salamanca.

Presupuesto orientativo

Verifica horarios/precios en webs oficiales.

Consejos finales

Asegúrate de llevar calzado cómodo, ya que caminarás mucho por las calles empedradas. También es buena idea descargarte una app de mapas para orientarte mejor. Recuerda que Salamanca es una ciudad universitaria, así que no dudes en interactuar con los estudiantes locales, que estarán encantados de compartir sus recomendaciones. Aprovecha al máximo tu visita y disfruta de la magia de Salamanca, donde cada esquina cuenta una historia.